Diseño compacto de 10 cm que cabe en cualquier rincón, LED de luz cálida y plástico BDP biodegradable conforman una pieza decorativa tan práctica como responsable. Gracias a su alimentación por 2 pilas AAA, ilumina estanterías o mesillas sin depender de enchufes, aportando un brillo tenue ideal como luz de ambiente o nocturna.
El molde reproduce fielmente al Maestro Jedi —tono verde, orejas puntiagudas y túnica envejecida— con acabado mate que evita reflejos. Al incluir el sello Lucasfilm, se integra en colecciones de merchandising sin perder valor.
El diodo integrado consume un mínimo de energía y permanece frío, prolongando la vida útil de las pilas y protegiendo el material de la figura. La intensidad suave favorece la relajación y acompaña sesiones de lectura o maratones galácticos.
La carcasa emplea Breakdown Plastic™, aditivo que acelera su descomposición en vertedero sin afectar la resistencia durante el uso. Un plus ecológico frente a luminarias convencionales de ABS estándar.
Con sus 8 × 8 × 11 cm y apenas 100 g, se traslada a eventos temáticos, escritorios de streaming o habitaciones infantiles. El interruptor inferior facilita el encendido rápido y el compartimento se abre con un simple destornillador.
Comparada con la Icon Baby Yoda, esta versión clásica ofrece modelado más anguloso y base estable, pensando en vitrinas de coleccionista. Frente a la Funko Pop! Lights Yoda, gana en fidelidad cromática y en el detalle del rostro, aunque pierde la posibilidad de alimentación USB de la Desktop Light 15 cm. Como punto débil, la luz no es regulable; sin embargo, su relación calidad-precio y la utilización de BDP la sitúan como la opción equilibrada para fans que buscan ambientar su espacio sin cables y con un toque sostenible.