Un gimbal o estabilizador para el móvil sirve para corregir las vibraciones y temblores cuando nos movemos con la cámara durante una grabación. Esto lo convierte en un complemento altamente recomendable al grabar mientras caminamos o realizamos algún tipo de deporte.
Un gimbal es un estabilizador conformado por una base motorizada que dispone de diferentes sensores cuya función es corregir los movimientos involuntarios que se realizan al grabar.
A la hora de escoger el mejor gimbal para comprar hay que explorar ciertas opciones.
En primer lugar el número de ejes:
En segundo lugar, hay que tener en cuenta para qué dispositivo necesitamos el palo selfie con estabilizador. Existen varias tipologías de gimbal:
En función del tipo, debemos elegir un estabilizador que disponga de compatibilidad con los mismos.
En tercer lugar, la autonomía. Un gimbal necesita de ella para que puedan funcionar los motores y los distintos sistemas electrónicos. Lo más común es que cuenten con una batería integrada.
Finalmente, los controles del gimbal nos permiten poder manejar todo sin tener que tocar el móvil. Los modelos de mayor calidad llevan incluido un joystick que te permite llevar a cabo movimientos a través de los ejes, a la vez que continúa realizando la función de estabilización.
Mientras que un palo selfie es una estructura fija, alargada y extensible, un gimbal es un palo selfie pero que incluye dos o tres motores cuya única función es estabilizar la imagen de la cámara cuando nos encontramos en movimiento.
El gimbal de un drone es el elemento que se encarga de estabilizar la cámara para poder realizar tomas más estables y con un mayor nivel de detalle. Es un dispositivo que ya viene incluido en los propios drones.
Para un dron existen gimbal de 2 y 3 ejes. Siendo los de 3 ejes los mejores, ya que dispone de 3 motores para la estabilización de la imagen, además de tener una mayor apertura de movimiento.